León Roldós tenía ya muchos años en la cátedra universitaria y había trabajado también en el área de investigaciones sociales. En el año de 1985 fue consultor en el Consejo Nacional de Universidades y Escuelas Politécnicas (CONUEP). Uno de los temas que propuso para abordar la problemática de la educación superior en el país, estuvo vinculado a la Autonomía Universitaria, y fue justamente esto lo que le animó a que aceptara la candidatura para el Rectorado de la Universidad de Guayaquil. Una vez que asumió el cargo en 1994 puso en marcha el proyecto de Reforma Universitaria.