La valorización turística de Mindo se debe a su inmensa biodiversidad (de paisajes o ecosistemas, especies y variedades genéticas). A ello se agrega su particular patrimonio ancestral (caminos y diversas edificaciones de los antiguos pueblos yumbos, y a las construcciones y equipamiento de algunas haciendas republicanas). Su atractivo se refuerza por la cercanía a Quito, la instalación de servicios (vías, hotelería) y el surgimiento de una línea empresarial que trabaja en el tema. Las inversiones de empresarios externos que se están haciendo en la parroquia y la presencia de numerosas personas que diariamente están en la zona, que se incrementan en los feriados de Quito, constituyen un enorme reto para los habitantes de Mindo.